La Aduana de Cuba ha aclarado que no está prohibido a los viajeros que entren al país transportar consigo encomiendas para terceras personas.
Declaraciones oficiales y contexto
En rueda de prensa, Jorge Luis Bubaire Quintana, jefe de la Aduana en el Aeropuerto Internacional José Martí, de La Habana, señaló que nunca se interferirá con la pretensión de los pasajeros que importen regalos destinados a su consumo, o al de familiares o amigos. "Siempre que se haga con licitud y apego a las normas establecidas en nuestro país", recalcó.
La declaración podría estar relacionada con una noticia que se hizo viral en los últimos días acerca de una supuesta nueva prohibición a los viajeros de transportar encomiendas para terceros al entrar al país, y de las posibles sanciones administrativas o penales que se les aplicarían.
El funcionario recalcó que la Aduana "jamás se convertirá en uno de los obstáculos para las operaciones de tránsito internacional de viajeros y de las operaciones de comercio externo".
El régimen y las restricciones
El régimen hace años lleva advirtiendo a quienes viajan con frecuencia a la Isla que no están autorizados a transportar consigo ningún tipo de "encomiendas" en nombre de otras personas naturales o jurídicas.
En marzo de 2018, en un mensaje dirigido a las llamadas 'mulas', subrayó que "el pasajero que sea portador de una encomienda asume la responsabilidad administrativa y penal derivada de la naturaleza de su contenido".
En lo que va de año, por el canal verde de la Aduana han transitado un 87% de pasajeros cuyas mercancías (alimentos, aseo, medicamentos e insumos médicos) están eximidas del pago de arancel, una medida beneficiosa que sin embargo podría durar muy poco.
En julio pasado, el primer ministro Manuel Marrero arremetió contra las personas que, según el régimen, se dedican a traer productos exentos de pago arancelario y los venden "a unos precios excesivos y abusivos".
Marrero abordó las excepciones arancelarias a la importación por personas naturales de medicamentos, alimentos y aseo, y anunció que la prórroga se extendió hasta septiembre, antes de señalar que "hay muchas distorsiones detrás de esta medida que la aprobamos para beneficiar al pueblo".
"Esto ha sido tomado por personas que se dedican a traer inmensas cantidades de productos para comercializarlos en un mercado negro a unos precios excesivos y abusivos", dijo.