Magdiel, un cubano que se encuentra en Estados Unidos bajo el estatus migratorio I-220A, ha compartido su experiencia sobre los retos de adaptación en un país desarrollado, destacando las dificultades económicas y sociales que enfrentan los inmigrantes. "La gente en Cuba piensa que llegar a Estados Unidos es tener dinero, casa y carro, pero no saben que uno llega sin una idea de cómo funciona la economía de un país desarrollado", afirmó Magdiel en su perfil de TikTok (@mag_el_cubano).
Adaptarse a una nueva realidad económica
Magdiel explicó que adaptarse a la realidad económica de Estados Unidos es un proceso que comienza por entender las grandes diferencias con la economía de la isla y aprender una nueva forma de gestión de las finanzas personales. "Cuando llegas no sabes cómo funcionan las tarjetas de crédito ni el mercado, no sabes cómo funciona nada. Sencillamente, cuando uno llega lo hace todo mal, y si no tienes a alguien que te guíe, es peor. Los tres o cuatro primeros años son de aprendizaje. Si lo haces bien, a partir del quinto año empiezas a ser alguien", dijo.
El estatus I-220A permite que las personas permanezcan en el país bajo supervisión mientras las autoridades migratorias determinan su situación. Sin embargo, quienes se encuentran bajo esta figura enfrentan procesos legales que complican más su situación, y generan estrés e incertidumbre.
Magdiel también habló sobre la realidad económica que muchos inmigrantes viven en Estados Unidos, desmintiendo las ideas erróneas que algunos cubanos en la isla tienen sobre la vida en el país vecino. "Lo que nadie dice es que es difícil reunir dinero en Estados Unidos. Lo tienes todo, pero vives al día. Trabajas, cobras tu cheque y pagas todas tus deudas, tu renta y tus 'billes'. La gente en Cuba piensa que vivir en EE.UU. es fácil porque andas en carro, tienes el refrigerador con comida y creen que tienes dinero en el banco, pero eso no siempre es así. La realidad es que casi nunca funciona de esa manera,” explicó.
A pesar de las dificultades, Magdiel destaca que es posible llevar una buena vida con esfuerzo y austeridad en los primeros años: "Se da uno una vida digna, pero lleva mucho sacrificio", advirtió.