La Unión Eléctrica (UNE) de Cuba ha comunicado que este sábado tres unidades termoeléctricas permanecen averiadas, lo que no representa una mejora para los hogares cubanos que seguirán soportando prolongados apagones, con un pronóstico de déficit de 725 MW en horario pico.
Según el informe compartido en el perfil de Facebook de la entidad, están fuera de funcionamiento por averías la unidad 5 de la Central Termoeléctrica (CTE) Rente, la unidad 3 de la CTE Santa Cruz y la unidad 2 de la CTE Felton. Estas mismas unidades ya estaban inoperativas el viernes.
Adicionalmente, 49 centrales de generación distribuida, seis más que el día anterior, están fuera de servicio por falta de combustible, lo que representa 540 MW afectados. También hay limitaciones en la generación térmica de unos 538 MW, superando los niveles de la jornada precedente. 🌩️
Impacto en el servicio eléctrico
El viernes, el servicio se restableció a las 7:48 a.m., pero volvió a tener afectaciones desde las 10:20 a.m., manteniéndose durante toda la madrugada del sábado. La máxima afectación fue de 723 MW a las 22:50 p.m.
Para este sábado, los directivos de la UNE estiman que en el pico horario entrarán en funcionamiento nueve motores de la patana de Melones con 150 MW y la recuperación de 60 MW actualmente inoperativos por falta de combustible.
Asimismo, se pronostica una disponibilidad de 2,495 MW y una demanda máxima de 3,150 MW para la hora pico, lo que deja un déficit de 655 MW. Si se mantienen las condiciones previstas, se espera una afectación de 725 MW en este horario.
Responsabilidad del gobierno y declaraciones oficiales
Esta semana, el gobierno cubano se deslindó de la responsabilidad sobre la duración y frecuencia de los apagones, señalando que el cronograma y los ajustes se hacen desde las provincias.
En una explicación confusa sobre cómo se calculan las “afectaciones” a nivel nacional a partir del déficit en la capacidad de generación y la demanda prevista, Vicente De la O Levy, ministro de Energía y Minas, afirmó que la distribución por provincias se realiza a partir de los circuitos apagables y los que no, dependiendo de las prioridades y particularidades locales.
El propio funcionario ha reconocido la fallida estrategia del gobierno para evitar apagones en el verano. Según el directivo, durante el primer semestre se realizaron los mantenimientos planificados, los cuales preveían niveles de afectaciones en el orden de las cuatro horas desde enero hasta el 30 de junio.
"Lo que no se cumplió fue el tema de las horas que habíamos planificado. ¿Qué sucedió? Que junto con la carga de mantenimiento que teníamos prevista hubo afectaciones importantes en este semestre con el tema de combustible", dijo De la O Levy en la Mesa Redonda televisiva transmitida el pasado miércoles.
"Hubo afectaciones importantes con el tema combustible, sobre todo en los meses de marzo, mayo y algunos días del mes de junio", agregó el funcionario, quien admitió que los apagones llegaron a ser de "hasta 12 horas en algunos lugares".