Gran indignación generó en los vecinos de la comunidad Ramón Domínguez de la Peña, conocida como el Macizo Cañero, en el municipio Venezuela, Ciego de Ávila, cuando las autoridades de comunales intentaron retirar la turbina que bombea el agua del lugar.
Un video publicado este martes en Facebook por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos muestra a los residentes protestando contra la decisión de retirar la turbina que abastece la cisterna de la cual depende la comunidad.
“Todo el pueblo está en contra de que se lleven la turbina, porque somos nosotros quienes estamos pasando trabajo”, se escucha decir a la persona que grabó el video.
“¿Cómo se van a llevar la turbina?”, cuestionó el hombre, incrédulo ante la posibilidad de que el régimen cubano fuera capaz de agravar aún más la escasez de agua que sufre la comunidad.
El autor del video también denunció que el gobierno planeaba llevarse la turbina para reemplazar una averiada en un barrio de “jefes”, según afirmó en su grabación.
En el clip se observa a varias personas protestando contra la decisión del régimen de retirar el equipo sin consultar a la comunidad, lo que demuestra, una vez más, que el gobierno rara vez toma medidas negociadas con quienes resultan afectados.
Protestas recurrentes por la falta de agua
No es la primera vez que el problema del acceso al agua potable desata protestas en Cuba.
Este martes último, vecinos de San Miguel del Padrón, en La Habana, desesperados e indignados por la falta de agua durante más de dos semanas, salieron a protestar y bloquearon calles de sus barrios.
Imágenes que circulan en redes sociales muestran a decenas de residentes de los repartos La Rosita y Siboney, en el municipio habanero, que se concentraron en las calles a primera hora de la noche en manifestaciones espontáneas, tras llevar más de 15 días sin el servicio básico.
En junio último, y luego de más de dos meses sin agua potable, los residentes del poblado villaclareño de Ecoa 13, en la carretera a Camajuaní en Santa Clara, cerraron la avenida en protesta por la negligencia de las autoridades y reclamaron el restablecimiento del servicio.
Los manifestantes confirmaron que llevan más de dos meses sin el líquido, por lo que se lanzaron a la calle a cerrar el tráfico al grito de "queremos agua".
El régimen cubano reconoció recientemente que más de 600,000 cubanos se encuentran actualmente sin acceso al servicio de abastecimiento de agua potable y justificó el problema con la crisis energética que afecta al país.
El presidente del Grupo Empresarial de Agua y Saneamiento, José Antonio Hernández Álvarez, reconoció que el abasto de agua está en situación crítica en Cuba, pero asegura que el principal problema son los continuos apagones que provocan fallas en el sistema de bombeo.