Un joven cubano de 20 años que llegó hace apenas un mes a EE.UU. cruzando fronteras mostró en días recientes cómo se quedó en la calle en Tampa luego de que la persona que lo estaba hospedando de forma provisional lo echó sin más.
“Es muy difícil estar en un país que no es el tuyo, sin familia y sin amistades. Créanme que es verdad, sin nadie que te apoye, sin nadie que te dé la mano”, dijo el joven -identificado en TikTok como Gisel Humberto- mientras documentaba en directo que caminaba al borde de una carretera mientras buscaba un lugar donde dormir.
“Es superduro salir de Cuba con la ilusión de llegar a un país y que todo te vaya bien. La ilusión de poder trabajar, sacar a tu familia adelante y que te pasen este tipo de cosas”, añadió en otro momento de su transmisión el migrante, que en un primer momento no dio detalles sobre la persona que lo hospedaba, ni tampoco el motivo por el que esa persona lo botó.
“Yo no vine a este país con el propósito de rendirme, yo vine a este país con muchos deseos de trabajar y aunque me pongan una traba y otra traba yo voy a salir adelante, porque fue la promesa que le hice a mi mamá, así que no voy a dejar que esos obstáculos me detengan. Palante”, añadió.
Un día en la calle: relato de supervivencia
Tras superar su primer día de dormir en la calle, el joven, natural de Holguín, explicó cómo se desarrollaron los hechos el día en que acabó sin techo. Contó que se dedicaba a hacer las labores domésticas en la casa donde se estaba quedando y que el día en cuestión esa persona -que no dijo si era hombre o mujer- llegó y le dijo que tenía que irse porque los dueños de la renta no querían a nadie ahí.
No le quedó más remedio que salir mochila al hombro a caminar. Buscó si había iglesias cercanas donde pudieran darle alojamiento, pero no encontró ninguna y optó por caminar rumbo al aeropuerto. Dice que por el camino un señor paró y lo llevó hasta el aeropuerto.
Mientras tanto, su madre en Cuba, que estaba al tanto de la situación y desesperada, contactó con unas amistades que le llevaron comida al aeropuerto y lo ayudaron. Dice que en el aeropuerto, además, una señora le regaló 20 dólares. Finalmente, las amistades de su madre le llevaron comida y le dijeron: “Irte para Cuba no es una solución. Ya estás aquí”.
Gisel Humberto precisó que de momento está en casa de las amistades de su mamá y que está contento porque ya le llegaron varios de sus papeles: mis ayudas humanitarias, el social security, mi cash, y me llegaron mis food stamps.
El joven, quien dijo que es bailarín de profesión y graduado en una escuela de arte, dijo estar muy agradecido con las personas que lo están ayudando a encaminarse. Aunque le gustaría en algún momento dedicarse al baile, dice ser consciente de que primero llegó a trabajar en lo que sea, a formarse, encaminarse y que luego que esté estable, podrá ampliar sus horizontes y tratar de abrirse paso profesionalmente.
En el apartado de comentarios de ambas publicaciones -que se viralizaron en pocas horas- muchas personas aconsejaron al joven cubano quien, en las últimas horas, recibió la visita del popular y solidario influencer cubano Dairon Cano.