Un pedido de urgencia se ha lanzado en redes sociales para ayudar a salvar la vida de la niña cubana de dos años Ester Lianet Asprón, que padece hidrocefalia y está reportada en estado de gravedad, en el Hospital Pediátrico de Las Tunas.
El activista Nelson Álvarez -identificado en redes sociales como “El Porfiao”- solicitó ayuda para recaudar cuanto antes los fondos que permitan adquirir la válvula autorregulable ventricular que necesita la pequeña, y de la cual no dispone el centro médico donde está hospitalizada.
“No hay tiempo que perder”, subrayó en una de sus publicaciones en Facebook.
Un llamado desesperado
“Amigos, esta pequeña es Ester Lianet Asprón, de dos años de edad, ha sido operada cinco veces y se encuentra en estado crítico, pues necesita una válvula autorregulable ventricular. La niña padece de hidrocefalia, y ahora mismo está en estado muy grave en el Hospital Pediátrico de Las Tunas”, expuso en otro post en la red social.
Álvarez imploró “la ayuda urgente de todos para intentar salvar la vida de la pequeña”.
“Si juntamos los fondos, yo tengo como mandarla a comprar”, afirmó, y proporcionó dos números de cuentas bancarias (CUP-9205959879504109 y MLC-9235959873600758) donde realizar los depósitos que permitirán adquirir el insumo médico para la paciente, y un número telefónico para hacer la confirmación (52523871). Las personas también pueden realizar aportes monetarios a una cuenta abierta en la plataforma GoFundMe.
El activista publicó una foto del dispositivo médico que necesita la pequeña Ester Lianet: una válvula autorregulable para hidrocefalia, la cual se coloca desde el cerebro hasta la vejiga, con el fin de drenar de manera continua el líquido cefalorraquídeo.
Explicó que, en estos momentos, la paciente no tiene puesta una válvula, sino “una manguera hacia el exterior, lo que hace a la niña vulnerable de adquirir una bacteria o infección”. Precisó, además, que se necesita una válvula de presión media.
La crisis del sistema de salud en Cuba
La hidrocefalia es una afección que padecen pacientes que no pueden regular el flujo de líquido cefalorraquídeo -producido por el sistema ventricular- a través de las vías naturales de su propio cuerpo.
La literatura médica advierte que, en una persona con hidrocefalia, el líquido cefalorraquídeo no se absorbe normalmente por el sistema venoso del cuerpo, sino que se acumula en los ventrículos del cerebro. “Si se deja sin tratar, el volumen creciente de líquido aumenta la presión intracraneal del paciente y puede conducir a afecciones médicas graves, tales como compresión del tejido cerebral y flujo sanguíneo alterado al cerebro”.
Debido a la grave crisis del sistema sanitario cubano, los hospitales del país no cuentan con medicamentos e insumos médicos básicos, como es el caso de las válvulas que necesitan las personas con hidrocefalia, en su mayoría niños. Por esa razón, son recurrentes en redes sociales los pedidos de colaboración de familiares y activistas, para adquirirlos en el exterior y ayudar a salvar las vidas de estos pacientes.
El gobierno cubano reconoce la crisis del sistema de salud y la escasez de fármacos e insumos que afectan especialmente a pacientes con enfermedades crónicas. Las denuncias de madres y padres sobre las dificultades para proteger a sus hijos enfermos ponen en evidencia la ineficiencia estatal para garantizar la salud de la población de la isla.