Un grupo de cubanos en la ciudad de Cárdenas, Matanzas, logró hacer realidad el sueño de recompensar a una señora que, durante 35 años, ha vendido maní en las calles, convirtiéndose en un ícono para generaciones de habitantes de esa urbe.
Kiryat Poey compartió un reel en Facebook donde se muestra el emotivo instante en que le entregan el dinero a la señora, que por décadas vendió maní en la esquina Vives y Calzada. La internauta informó que se entregó a la vendedora de maní la mitad del dinero recaudado en su honor, señalando que la cifra obtenida superó las expectativas iniciales. Por razones de seguridad, no se reveló la cantidad exacta, pero aseguró que el objetivo fue cumplido.
Poey consideró que esta iniciativa destaca el espíritu solidario de los Cardenenses, afirmando que: “Nosotros somos los mejores, con toda la humildad y el orgullo que sentimos cada Cardenense, marcando la diferencia”.
Un llamado a la solidaridad
La iniciativa surgió a partir de una publicación realizada por Christian Arbolaez en el grupo de Facebook “Cardenenses en Facebook”, donde preguntó si alguien recordaba a la señora que vendía maní en la esquina Vives y Calzada.
Arbolaez admitió que, para su sorpresa, la señora sigue vendiendo maní en el mismo lugar, al igual que otra mujer mayor que se dedica a la venta de calabacitas chinas. Inmediatamente, organizaron la campaña de recaudación de fondos para ayudar a las dos ancianas vendedoras ambulantes de la ciudad de Cárdenas, por dedicar gran parte de sus vidas al trabajo en las calles.
Frecuentemente, los activistas cubanos organizan a través de las redes sociales diferentes iniciativas para beneficiar a las personas mayores, que a menudo viven en situaciones precarias.
Realidad alarmante en Cuba
El mes pasado, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) presentó el VII Informe sobre el Estado de los Derechos Sociales en Cuba 2024, con reveladores resultados de la realidad cubana. La organización no gubernamental sobresaltó en el documento, que "el 89% de las familias cubanas sufren pobreza extrema”, un punto porcentual más que el pasado año y un 13% más que en 2022.
Uno de sus datos más significativos es el que resalta que “7 de cada 10 cubanos han dejado de desayunar, almorzar o comer, debido a la falta de dinero o la escasez de alimentos”. Según el OCDH, “donde más se padece esta carencia alimentaria es entre las personas de más de 70 años”.