Expertos de Rusia y Cuba se han unido esta semana para investigar el virus Oropouche, una enfermedad tropical que se ha extendido por todo el territorio cubano durante este verano.
La colaboración incluye el uso de alta tecnología en pruebas diagnósticas desarrolladas por especialistas rusos, con el objetivo de actualizar conocimientos sobre infecciones tropicales y realizar estudios relevantes para la región del Caribe.
Colaboración internacional en salud
Los expertos del Servicio Federal de Supervisión de la Protección y el Bienestar del Consumidor de Rusia estarán de visita en La Habana hasta el 8 de agosto. Estas investigaciones son parte de la cooperación bilateral en el ámbito de la salud y el bienestar epidemiológico de la población.
Los estudios se realizan en un momento crítico para el sistema de salud en Cuba, golpeado por la escasez de medicamentos, de insumos para la atención de los pacientes y hasta de profesionales en los centros médicos.
El virus de Oropouche, transmitido por mosquitos de las especies culicidae y culicoides, circula por primera vez en Cuba y se han reportado casos a lo largo y ancho del territorio nacional. La enfermedad se manifiesta con síntomas como fiebre, dolores de cabeza, musculares y articulares, y en algunos casos, vómitos y diarreas. Tiene mucho parecido a la sintomatología del dengue.
Propagación y antecedentes del virus
Los primeros casos fueron confirmados en mayo en Santiago de Cuba y rápidamente se propagaron a todo el país. En 2024, se reportaron casos de fiebre de Oropouche en Bolivia, Colombia, Perú y Brasil, con al menos dos muertes confirmadas por este virus.
La llegada de estos científicos rusos ofrece una oportunidad para que Cuba pueda enfrentar este desafío sanitario con mejores recursos y conocimientos, aunque la situación sigue siendo alarmante debido a las carencias crónicas del sistema de salud cubano.