Cristina Fernández de Kirchner, exvicepresidenta de Argentina, solicitó el sábado la publicación de todas las actas electorales de las recientes elecciones en Venezuela, apelando al legado de Hugo Chávez.
Un llamado a la transparencia desde México
Durante un discurso titulado "Una utopía desde el sur" pronunciado en Ciudad de México, adonde fue invitada por el partido de gobierno Morena, Fernández destacó la importancia de la transparencia electoral en el país sudamericano. "Pido por el propio legado de Chávez que se publiquen las actas", reclamó, haciendo referencia al fallecido líder venezolano.
Fernández además señaló que "comparto el comunicado" de Brasil, México y Colombia, quienes en conjunto pidieron a las autoridades electorales de Venezuela que avancen "de forma expedita" y den a conocer públicamente los datos desglosados de las mesas de votación de los comicios presidenciales.
La exmandataria argentina, quien fue cercana a Chávez y una fiel aliada junto al régimen de Cuba, subrayó que la publicación de las actas electorales es crucial para mantener la credibilidad del proceso democrático en Venezuela.
Acompañada por una comitiva de cuatro dirigentes kirchneristas, llegó el viernes a México para compartir sus "propuestas para el futuro de la región". En su discurso, abordó la compleja situación política de Venezuela, haciendo un llamado a una visión más equilibrada sobre el país. "En Venezuela no hay ni diablos ni ángeles", expresó, antes de repasar los últimos años del chavismo, destacando que Venezuela posee la primera reserva de petróleo convencional del mundo.
También recordó el golpe de estado de 2012, cuando Hugo Chávez fue brevemente derrocado y Pedro Carmona asumió la presidencia durante dos días, con el reconocimiento de Estados Unidos.
Su intervención se produce en un momento de alta tensión y controversia política en el país, donde se han planteado numerosas denuncias de fraude electoral y la oposición asegura que ganó con más de 30 puntos de ventaja sobre el actual mandatario Nicolás Maduro. La comunidad internacional y los observadores de derechos humanos estarán atentos a cualquier respuesta del gobierno venezolano y a los posibles desarrollos en los próximos días.