Agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (USBP) y de agencias asociadas detuvieron este martes en la mañana a 33 balseros procedentes de Cuba que lograron tocar tierra en los Cayos de Florida. El agente jefe de la Patrulla Fronteriza en el Sector Miami, Samuel Briggs II, informó en un breve comunicado en la red social X que los oficiales acababan de responder a un desembarco de migrantes en Cayo Hueso, donde encontraron al grupo de cubanos.
Briggs anunció que los inmigrantes serían puestos bajo custodia federal y procesados para su expulsión, según disponen las políticas migratorias del gobierno de EE.UU. La nota no precisó el estado de salud de los balseros cubanos tras arribar a suelo estadounidense, ni detalles como la composición del grupo y de qué lugar de la isla procedían.
Un fenómeno recurrente
Hace solo cinco días, la Guardia Costera de EE.UU. (USCG) interceptó a 17 balseros cerca de los Cayos de Florida y los devolvió a Cuba. El gobierno estadounidense ha reiterado que los migrantes que arriben por mar y sean detenidos por la Patrulla Fronteriza serán procesados por la agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y la Oficina de Detención y Deportación (ERO), para ser devueltos a su nación de origen, con la prohibición de reingresar legalmente a EE.UU. por cinco años.
Sin embargo, pese a los intentos de las autoridades estadounidenses de disuadir la migración ilegal por vía marítima, muchos cubanos siguen arriesgándose a cruzar el Estrecho de Florida en embarcaciones precarias, al no tener opciones legales para salir del país, sumido en una profunda crisis generalizada.
El drama detrás de la migración
Las duras condiciones de vida, la carencia de libertades y la falta de oportunidades en Cuba continúan generando un éxodo masivo e irregular desde la isla hacia Estados Unidos, tanto por mar como por tierra. Solo en junio pasado, 17,563 cubanos entraron por las fronteras de EE.UU., según datos publicados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). De ese total, 6,216 lo hicieron por vía marítima, lo que confirma que se mantiene la afluencia de balseros cubanos al país norteamericano.
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