El comediante Otto Ortiz ha ilustrado de manera cómica el ciclo de vida de un calzoncillo en Cuba. La prenda, que comienza como ropa interior, termina siendo reutilizada como paño para desempolvar en los hogares.
Ortiz explicó en Facebook este miércoles que cuando un calzoncillo casi nuevo se le hace un pequeño agujero, deja de ser una prenda seductora y pasa a utilizarse en labores de albañilería, mecánica o deportes extremos. "¿Y hasta cuándo está en esas tareas? Hasta que el hueco sea tan grande, que salga un testículo por ahí", señaló el humorista, apenas conteniendo la risa.
"Entonces pasa a lo que es el área de limpieza", apuntó. "Y se coge como trapito para el polvo, para mecánica, para lavarte las manos". Por último, afirmó: "Eso se llama resistencia creativa".
La Televisión Cubana: un paraíso optimista
Este martes, Ortiz, conocido por utilizar el humor para denunciar los problemas de la sociedad y el régimen, expresó que desearía vivir en la Televisión Cubana: "Hay tanto optimismo, tanta alegría, tanta fe en el futuro".
Ortiz lamentó en Facebook su residencia en Nuevo Vedado y enumeró las razones por las cuales considera que sería mucho mejor vivir en la Televisión Cubana. Algunas de las razones de mudarse para el “barrio” de la Televisión Cubana es que "ETECSA, Aguas de La Habana, la Empresa Eléctrica, Salud Pública y hasta los agros particulares, fueran todos vanguardias nacionales y en función del pueblo", denunciando así que los medios de prensa voceros del oficialismo transmiten una realidad cubana sin conflictos y lavada.