La aprobación unánime de las nuevas leyes de Migración, Ciudadanía y Extranjería este viernes en el Parlamento cubano está generando numerosas críticas en las redes sociales. Entre los miles de comentarios, varios cubanos coinciden en que se trata de una "burla a la inteligencia del pueblo" y una estrategia desesperada para que los emigrantes no corten sus lazos definitivamente con Cuba.
Una usuaria de Facebook, cuyo comentario resonó entre decenas de personas, destacó la falta de autenticidad en las decisiones de los diputados, señalando que en la Asamblea Nacional del Poder Popular "todo está escrito, dicho y ordenado por los dueños de la finca".
Eliminación del límite de 24 meses: ¿Una trampa?
Sobre la eliminación del límite de 24 meses para la estancia en el exterior sin perder la residencia en Cuba, esta emigrante recuerda que "la mayoría de los cubanos que salió hace varios años atrás ya no quiere volver a la isla y ha sacado a una parte de su familia".
Además, muchos de los emigrados recientes, beneficiados por las políticas de la administración Biden, no podrán regresar en el antiguo plazo estipulado, y eso, en su criterio, es uno de los aspectos que obligó al régimen a modificar la norma jurídica.
"Es un Estado que no funciona, no brinda seguridad ni justicia, no crea las condiciones básicas de acceso a la buena educación y salud. Es totalmente débil, fracasado, y ha generado mucha rabia y descontento. Solo se necesita de un empujón para derribarlo", dijo la usuaria en Facebook.
En los comentarios sobre este delicado tema, también hay interpretaciones sobre la aprobación de la polémica ley en medio de un complejo panorama político internacional. Varios cubanos coinciden en que el posible regreso de Donald Trump a la Casa Blanca aceleró la toma de medidas por parte del régimen, lo que devino en una sorpresiva aprobación de leyes por unanimidad en el Parlamento, para fortalecer el poder del Estado.
La aprobación por unanimidad de las leyes de Migración, Ciudadanía y Extranjería, lejos de causar admiración por la "unidad de criterios" entre los diputados cubanos, provocó risas, burlas y críticas al gobernante Miguel Díaz-Canel, a Raúl Castro y al modelo de gestión política en el país.
"El miserable pelele dijo que eso es así porque es 'la dictadura del pueblo'. Cuando uno piensa que ya llegó al colmo, va Miguel Díaz-Canel y rompe la barrera", expresó un cubano.
Se refería a las palabras del mandatario en el discurso de clausura del tercer período ordinario de sesiones de la X Legislatura de la ANPP donde, además de justificar el procedimiento de aprobación de leyes, Díaz-Canel dijo:
"A Cuba no la dirige una persona, ni siquiera un pequeño grupo de personas. Esta es la rara dictadura que jamás podrán entender los enemigos de la revolución. La dictadura de los trabajadores. La dictadura del pueblo que representamos los aquí reunidos por elección popular".