El Gobierno cubano ha confirmado la persistente afectación en la distribución de los productos de la canasta normada alimenticia que se venden a su población. Desde hace años, estos productos no llegan completos o sufren de constantes retrasos.
El 2023 concluyó con afectaciones en frijoles, azúcar, aceite, café, pollo, productos cárnicos, huevos y combustibles domésticos, las cuales se mantuvieron en el primer trimestre de 2024, según un reporte del sitio digital oficialista Cubadebate, que expuso la “rendición de cuentas” del Ministerio de Comercio Interior ante la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP).
Un informe presentado ante los diputados cubanos por la ministra de esa entidad gubernamental, Betsy Díaz Velázquez, reconoce que hay un fraccionamiento en las entregas a la red minorista por dificultades financieras que impiden alcanzar las coberturas necesarias y la oportunidad en la recepción de los productos. Esto se refleja en la mesa del cubano debido a la escasez de productos que, mes a mes, promete el gobierno y no cumple con su entrega.
Control y robos en la distribución
Esa carencia ha aumentado el control que el régimen tiene sobre varios productos como los artículos de aseo y los cigarros, además de “productos seleccionados de las cadenas de tiendas y otros artículos por decisión de las autoridades locales”, apuntan.
Otro punto al que se refirió la ministra fue en la ocurrencia de robos. “Las afectaciones se centran en arroz, frijoles, azúcar, café, cigarros, pastas alimenticias y leche en polvo”, dijo. Asimismo, señaló a Pinar del Río, La Habana, Las Tunas, Holguín y Guantánamo como las provincias donde ocurren más robos en bodegas.
Al entregar a Esteban Lazo Hernández, presidente de la ANPP, el informe de rendición de cuentas del MINCIN, debatido entre los diputados durante este período ordinario de sesiones, la ministra Díaz Velázquez reconoció que su ministerio estableció “determinados compromisos que hoy vamos a decir que no están todos cumplidos, pero bueno… tenemos el resto del año para hacerlo”.
Se trabaja en el “perfeccionamiento del comercio interior en Cuba”, se reconocen “las permanentes insatisfacciones” y las “limitaciones de combustible físico”, pero se aplaude “el esfuerzo que se realiza para que los productos esenciales lleguen al pueblo”. Así se proyectaba la rendición de cuentas ante los diputados del régimen cubano.
“Los barcos que están y no pueden abrir, la distribución que no se termina, los traslados, en fin. Los trabajadores siguen haciendo un esfuerzo distribuyendo sin energía eléctrica, cuando aparece el carro, en medios alternativos”, balbució la ministra en el encuentro cuyo extracto fue divulgado por el Noticiero Nacional de Televisión.
En el Palacio de las Convenciones de La Habana, el primer ministro cubano Manuel Marrero Cruz dijo, durante el trabajo en la comisión de Atención a los Servicios, previo al tercer período ordinario de sesiones de la décima legislatura, que la canasta normada, “a pesar de sus insuficiencias, es una conquista que se mantendrá”.
El dirigente explicó que “casi todos los productos de la canasta familiar hay que importarlos, y esta es la prioridad a la hora de destinar divisas para invertir”.
Sin embargo, las denuncias de atrasos y faltantes en la canasta normada no dejan de leerse en redes sociales.
Vale recordar que a inicios del mes de julio, los pobladores de Holguín recibieron el faltante de arroz que el gobierno les debía de junio, una situación similar se vivió en toda la zona oriental de la isla.
Desde el 2022, se ha incrementado la dependencia de las importaciones para asegurar los productos, debido a la disminución de la producción nacional de arroz, frijoles, huevos, leche y otros alimentos.