El Buró Federal de Investigaciones (FBI) y la fiscalía general de Florida revelaron este miércoles los pormenores del escalofriante complot del empresario cubanoamericano Sergio Pino para supuestamente asesinar a su esposa, Tatiana Pino, en medio de un turbulento proceso de divorcio que ella había solicitado desde abril de 2022.
El Fiscal Federal Markenzy Lapointe ofreció una conferencia de prensa, citada por medios locales, donde detalló la investigación. El caso culminó con el suicidio de Sergio Pino la mañana del martes en su mansión frente al mar, en Coral Gables, cuando el FBI intentaba realizar un registro en la vivienda y entregarle una orden judicial relacionada con las acusaciones de intento de asesinato.
Un matrimonio en crisis
“Este es un caso sobre un esposo, el señor Pino, quien decidió después de años de matrimonio que iba a matar a su esposa”, comenzó Lapointe su estremecedora explicación. El plan se extendió por más de dos años, y Pino buscaba eliminar a su esposa antes de que el divorcio se hiciera definitivo para conservar la totalidad de su fortuna.
Según Lapointe, Pino contrató a dos equipos distintos para ejecutar el asesinato. Un grupo de nueve personas en total ha sido arrestado en relación con el caso, y cuatro de ellas ya han sido acusadas formalmente. En el segundo grupo, que había recibido dinero por su trabajo, se encuentra Fausto Villar, un delincuente convicto que trabajó como techador para Pino y que ya ha sido acusado.
Otro implicado es Bayron Bennent, ayudante en un yate propiedad de Pino, señalado como supuesto responsable de obtener fentanilo que Pino habría usado para intentar envenenar a su esposa. Los informes indican que uno de los equipos recibió instrucciones de llevar a cabo el asesinato antes de la próxima audiencia de divorcio, con la promesa de un bono de 150 mil dólares si lograban evitar que el crimen se conectara con el empresario inmobiliario.
Métodos fallidos y amenazas
Los varios métodos fallidos empleados por los conspiradores incluyeron un intento de envenenamiento con fentanilo, varias formas de acoso y un intento frustrado de atropello con una camioneta alquilada. Según las pesquisas, el punto culminante llegó en junio de este año cuando un grupo de sicarios siguió a Tatiana Pino hasta su hogar, donde uno de ellos intentó dispararle sin éxito.
Posteriormente, la hija adulta del matrimonio fue amenazada con un arma, aunque el atacante decidió no disparar ya que su objetivo principal era Tatiana. La investigación, que involucró al FBI y a la policía local, descubrió que Pino había pactado pagar la exorbitante suma de 300,000 dólares, entregada en dos partes, por el asesinato de su esposa. Las autoridades encontraron evidencia de que parte del dinero fue transferido, aunque no revelaron detalles sobre los remitentes o los destinatarios.
El suicidio de Sergio Pino
El trágico desenlace se produjo el martes, cuando agentes del FBI intentaron arrestar a Sergio Pino en su residencia. Ante la inminente detención, Pino se quitó la vida disparándose en un dormitorio de su hogar, luego de que el equipo de tácticas especiales llamara a la puerta para finalmente entrar en la residencia.
Sam Rabin, uno de los abogados de Sergio Pino, criticó duramente la operación policial. “El nivel de actividad policial en su residencia no tenía precedentes y era innecesario, especialmente porque habíamos ofrecido entregarlo en varias ocasiones si era necesario”, indicó. El letrado añadió que los acontecimientos del martes marcan un final muy trágico para una investigación que estaban seguros de poder defender con éxito.
“Circulaban muchos rumores y acusaciones, pero lo que faltaban eran evidencias de irregularidad por parte del señor Pino”, alegó Rabin. Las autoridades afirmaron que continúan investigando el caso para esclarecer todos los detalles y llevar ante la justicia a los responsables.