Las autoridades cubanas han confirmado que la circulación del virus de Oropouche en Pinar del Río representa una grave amenaza para la salud pública. Los especialistas han identificado este virus en la cabecera provincial, principalmente en el área de Salud Raúl Sánchez, tras un aumento significativo de pacientes con síndromes febriles inespecíficos que no correspondían con el dengue.
La doctora Giselle Ramos Águila, directora provincial de Epidemiología, informó a Guerrillero que la detección del virus de Oropouche se produjo tras un meticuloso proceso de diagnóstico diferencial. Subrayó la similitud entre el Oropouche y el dengue, destacando la necesidad de implementar un protocolo de vigilancia riguroso para prevenir su propagación.
Un sistema de salud bajo presión
Hasta el momento no se han registrado casos graves, pero la situación exige una atención especial. El protocolo establecido incluye la recomendación a la población de acudir a los centros de salud al experimentar síntomas de fiebre inespecífica. Los médicos serán los encargados de realizar el diagnóstico diferencial y determinar la necesidad de ingreso hospitalario, especialmente para grupos vulnerables como niños menores de dos años, embarazadas, puérperas y personas con comorbilidades.
El virus del Oropouche se manifiesta con fiebre, dolor de cabeza y articulaciones, y en algunos casos, sangrado gingival. Las medidas de prevención son las mismas a lo largo y ancho del país: hacer autofocales y eliminar los criaderos de mosquitos. Ambas cosas han demostrado ser insuficientes pues el virus se ha extendido por toda Cuba.
La aparición del virus de Oropouche y el incremento de casos de dengue añaden presión a un sistema de salud depauperado, carente de medicamentos y hasta de profesionales en los hospitales y policlínicos. El gobierno advirtió que no tiene recursos para fumigar las viviendas y al parecer tampoco cuentan con combustible para recoger los basureros que hay por doquier. Mientras, la insalubridad crece en Cuba. 🦟🔴