La Guardia Costera estadounidense (USCG) ha detallado el proceso de búsqueda de embarcaciones de balseros en las aguas del Estrecho de Florida. En un reportaje del programa La Voz de América, se muestra cómo los aviones de vigilancia de la USCG patrullan diariamente las aguas entre Cuba y el sur de Florida en busca de inmigrantes que intentan ingresar irregularmente a Estados Unidos.
Los guardacostas explicaron que buscan embarcaciones inseguras cargadas de migrantes que intentan llegar a las costas del país a través de un mar extremadamente peligroso. El Estrecho tiene en su punto más angosto 150 km de ancho y 1,800 metros de profundidad. "Creemos que están en pequeñas embarcaciones en un mar peligroso y necesitamos asegurarnos de que están a salvo", afirmó el teniente E.J. Cunningham. Explicó que buscan un perfil único que se distinga de un crucero o una embarcación recreativa, algo que parezca una embarcación muy rústica. Los técnicos ven la embarcación en radares especializados y sensores infrarrojos nocturnos.
Patrullaje con historias sorprendentes
Blaine Willis, técnico eléctrico de la USCG, compartió anécdotas del patrullaje: "Teníamos una embarcación que no era más que un montón de tablones de madera sujetos con cuerdas y algunos barriles juntos. En otra ocasión localizamos, fuera de aguas territoriales cubanas, una balsa para dos personas que tenía una motoguadaña en la parte trasera, que el tipo sostenía como motor", comentó un agente.
Asimismo, Robert Depe, técnico de mantenimiento, dijo que "a veces los pasajeros se delatan. Intentan evitarnos, tratan de cubrirse con una carpa, se agachan y tratan de esconderse. Otras veces simplemente están ahí, a veces nos señalan e intentan mostrarnos: 'Hey, ahí están, pueden vernos'." Luego, el avión dirige al Guardacostas al lugar exacto y el barco sube a bordo a las personas. Cada migrante recibe una manta, subraya la USCG.
Una noche agotadora pero vital
El teniente Samuel Krakower, Comandante del Raymond Evans, relató que "una noche la cubierta del barco guardacostas acogió a más de un centenar de cubanos que permanecieron allí varios días para ser procesados. La mayoría fue devuelta a Cuba. Fue una noche agotadora pero varias de esas embarcaciones estaban en peligro de hundirse y fue una oportunidad para rescatarlos", comentó.
En el reportaje, la USCG señaló que también patrullan el Estrecho de Florida en busca de embarcaciones haitianas, las cuales viajan con más personas. "Pueden venir cargadas con más de 94, mucho más que las 20 o 30 personas que se pueden ver en una balsa cubana", aseguró Krakower. Según el reporte, el pasado año fiscal 1,800 haitianos y más de 6,600 cubanos fueron devueltos a sus países.
La crisis migratoria cubana continúa imparable. El pasado 25 de junio fueron repatriados siete balseros detenidos en las costas floridanas, y el pasado 1 de julio un grupo de 15 cubanos fue detenido tras desembarcar en Cayo Hueso. Sin embargo, la cifra de encuentros es notablemente inferior a las del año 2022, cuando la USCG informó que en un vuelo de cinco horas podían encontrar hasta cuatro embarcaciones. El periodista del medio Newsy, Ben Schamisso, acompañó en esa ocasión a dos pilotos de la agencia en un vuelo de rutina y pudo comprobar esa realidad, que evidenció la crisis económica, social y política de dos países vecinos: Cuba y Haití.