En la provincia de Santiago de Cuba, que enfrenta una grave escasez de medicamentos y la circulación confirmada de los virus del dengue, influenza, Oropouche y SARS-CoV-2, especialistas alertan sobre una peligrosa práctica: las familias están tratando la fiebre con té.
La doctora Daritza Rodríguez Olivares, responsable del Programa de Atención Materno Infantil en Santiago de Cuba, alertó que los niños afectados por este virus pueden tener diarreas y vómitos, según reportó el canal oficialista Tele Turquino.
Una tendencia preocupante
En este contexto, se ha observado una tendencia peligrosa en los últimos días: “Se está administrando té de diversas plantas a los niños tanto en zonas rurales como urbanas. En ocasiones están hechos con plantas tóxicas que pueden agravar el estado de los pequeños y llevarlos a necesitar cuidados intensivos”.
Aunque la alerta de la doctora busca proteger la salud de los niños al señalar una práctica riesgosa, no menciona las razones que llevan a los padres a recurrir a la administración de té. Esta situación se debe a la escasez de medicamentos básicos como los antidiarreicos y los antipiréticos, estos últimos empleados para reducir la fiebre y aliviar el malestar.
El régimen ha reconocido en varios momentos la escasez de medicamentos promoviendo fármacos de origen natural como solución a su incapacidad para fabricar o importar las medicinas sintéticas.
Y la falta de medicamentos no se limita solo a la red de farmacias de Santiago de Cuba, también en los hospitales se ha denunciado que no hay ni dipirona para bajar la fiebre.
Un problema nacional
La crisis de desabastecimiento en las farmacias, que el propio gobernante Miguel Díaz-Canel anunció se prolongará, viene a combinarse con la confirmación en Cuba del virus del Oropouche.
Sobre esta peligrosa enfermedad, Rodríguez también hizo hincapié en que se están reportando casos de niños con fiebres, sobre todo en menores de diez años: “La población tiene la percepción de que como el Oropouche no mata, no constituye un problema, y es ahí donde se presentan las complicaciones porque llegan de forma tardía a los hospitales”.
Recientemente, La Habana y Las Tunas confirmaron la presencia del nuevo virus en la población, lo que evidencia que el patógeno se extiende a todo el país, y ya son 12 provincias afectadas por Oropouche.