El huracán Beryl, con vientos que superan los 250 km/h y que lo posicionan en la categoría 5, la más alta en la escala de Saffir-Simpson, ha mostrado su destructiva fuerza en imágenes impresionantes captadas en el ojo del ciclón.
La impresionante estructura del ojo del huracán
Un avión de reconocimiento se adentró en el centro de circulación del poderoso organismo tropical, registrando su estructura perfecta. Las imágenes y videos fueron publicados por los Hurricane Hunters en la red social X. "Una mirada al ojo del huracán Beryl hoy", publicó el perfil, explicando que Beryl se convirtió el lunes por la noche en "la primera tormenta del Atlántico en alcanzar la categoría 5, aunque fue degradada a categoría 4 el martes".
Este lunes, otro avión de reconocimiento, esta vez de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos, captó imágenes impresionantes del potente huracán Beryl, cuya categoría en ese momento era de 4. En el video publicado en la red social X, se puede observar nítidamente una parte del fenómeno atmosférico, que tocó tierra la mañana de este lunes en Carriacou, una pequeña isla de Granada, donde se sintieron ráfagas de vientos de hasta 150 millas por hora (240 km/h).
Las imágenes satelitales también captaron este domingo el poder que tiene este ciclón. “Increíbles imágenes satelitales del agitado huracán de categoría 4 Beryl y su impresionante, pero peligroso, ojo en este momento acercándose a las Islas de Barlovento”, escribieron en la cuenta de X Weather/ Meteo World, junto a un video donde se puede apreciar el tamaño del huracán.
Impacto en Cuba
A pesar de que los pronósticos prevén que el ojo del huracán Beryl pase bien alejado de territorio cubano, la isla quedará en el llamado “lado sucio” del potente fenómeno meteorológico, es decir, el más fuerte en términos de vientos y lluvias. Según el pronóstico del Centro Nacional de Huracanes (NHC), desde la madrugada del miércoles y hasta el jueves algunas zonas del país podrán sentir vientos de hasta 63 km/h por rachas.