Una madre cubana denunció que su hija de 15 años fue violada por el subdirector de su escuela, el Politécnico Panchito Gómez Toro, de Holguín, y actualmente el agresor se encuentra en libertad bajo fianza sin fecha de juicio.
El hecho ocurrió el pasado 7 de diciembre y hasta la fecha la niña ha tenido que presentarse durante 4 veces ante instructores y fiscales para recordar lo que pasó ese día. "Ese hombre pasó solo un mes en prisión provisional y actualmente está libre en las calles porque su abogado lo sacó con una fianza de 15 mil pesos", explicó la madre, identificada en Facebook como Evis Tamayo.
"Mi familia no duerme porque este hombre está en las calles sin fecha de juicio, a pesar de que han pasado seis meses del hecho. La niña es menor de edad con una discapacidad mental. Aunque su edad cronológica es de 15 años, tiene diagnosticada una edad mental de 10 años", añadió Tamayo.
Detalles del incidente
Los hechos se remontan al 7 de diciembre cuando el hombre, valiéndose de su autoridad, llevó a la adolescente, a las 7.00 am, a un aula situada en un cuarto piso de la escuela, cerró la puerta con candado y mantuvo con ella relaciones sexuales no consentidas ya que la niña quiso salir de allí y él no se lo permitió.
Sin embargo, la justicia cubana entiende que si la menor no gritó, no es una violación sino un delito menor. "Hoy me siento desamparada, decepcionada, frustrada, pero no vencida", expresó la madre de la niña en una publicación en Facebook.
Tamayo cuestiona que si su hija desde los 5 años es tratada por psicólogos debido a diferentes trastornos, diagnosticada con una edad mental de 10 años, es asediada por el subdirector de la escuela en la que estudia, y bajo pretextos infundados éste la encierra en un aula en la cuarta planta a las 7 de la mañana, cierra el aula con candado, no accede a la petición de la adolescente de que quiere salir, le dice que se baje la falda y la penetra... ¿este acto es considerado como una agresión sexual? ¿O depende del CONSENTIMIENTO?", pregunta la mujer.
La madre comenta que tras la violación la niña cambió de la noche a la mañana. Tamayo empezó a notar que su hija dormía mal y hablaba dormida. Finalmente se enteró del hecho porque la niña lo comentó a una amiga del politécnico y ésta se lo dijo a su mamá que, a su vez, se lo contó a la guía base de su escuela. Esta profesora fue quien la llamó y le informó de lo ocurrido.
A partir de que el centro tuvo conocimiento tomó medidas inmediatas con el subdirector. "Educación actuó rápido y bien y tiene un expediente muy bueno y completo. Los que se están durmiendo y viciando el caso están en la Policía. Educación investigó bien e inmediatamente decidió retirarlo de sistema. Por la parte administrativa no tengo quejas", señaló Tamayo en conversación con CiberCuba.
Ella cuestiona que su hija, con una edad mental de 10 años, pueda exonerar de responsabilidad al subdirector de la escuela, solo porque la ley entiende que al no existir violencia, fuerza o intimidación no es violación, sino un delito menor penado con entre 1 y 3 años de cárcel.
La madre cuestiona, además, que teniendo en cuenta la discapacidad de su hija se entienda que pudo haber consentimiento, teniendo en cuenta que el subdirector le triplica en edad y en madurez.
Éste no es el primer caso de una madre cubana que denuncia la laxitud de la Justicia cubana a la hora de juzgar a los violadores. En junio de 2021, CiberCuba publicó el caso de una menor de 13 años que sufrió una violación grupal y lejos de encarcelar a los violadores, los dejaron en libertad y estos iniciaron una campaña para desacreditar a la niña. Ante la presión mediática, se aceleró el proceso y los seis violadores fueron condenados a penas de 21 años de cárcel.