El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel ha señalado al sector privado como responsable de la falta de efectivo en los cajeros automáticos del país, tras el inicio del proceso de bancarización en Cuba.
En el programa que Díaz-Canel conduce en la plataforma YouTube de Presidencia Cuba, el mandatario mencionó varias quejas de ciudadanos que denuncian que muchas mipymes piden pagos en efectivo en lugar de sumarse al proceso de bancarización.
"Esto tiene que ver con el control que tienen que hacer las entidades estatales para eliminar esta distorsión. Hay que ser más exigentes con quienes no se acaban de insertar en el proceso de bancarización. La población nos está diciendo lo que hay que hacer y dónde están las insatisfacciones", afirmó Díaz-Canel.
El problema de la bancarización
El proceso de bancarización comenzó hace unos años en Cuba. Aunque avanzaba lentamente, el gobierno decidió acelerarlo en agosto de 2023, a pesar de no contar con la infraestructura ni la preparación tecnológica adecuada. Esta decisión se tomó en un momento de alta inflación y una crisis económica aguda en el país.
La situación ha dejado a muchas personas, sin conocimientos sobre nuevas tecnologías y sin saber cómo hacer transferencias electrónicas, en largas colas en los cajeros automáticos sin poder sacar su dinero para hacer las compras o pagar servicios básicos, debido a la falta de efectivo en los bancos.
Juana Lilia Delgado Portal, ministra presidenta del Banco Central de Cuba (BCC), afirmó que el problema tiene solución y enfatizó que "en el país hay más dinero que nunca", aunque este no llega a manos de la mayoría de la población.
"No es que no haya dinero en la economía, hay más dinero que nunca, pero se ha invertido el flujo de ese dinero. Hay más salida del sistema bancario de lo que regresa; eso altera todo el ciclo del movimiento del efectivo y entonces cuesta trabajo cubrir las demandas de efectivo", admitió Delgado Portal.
Según su criterio, el efectivo que sale del sistema bancario se concentra en pocas manos. Por tanto, cree que el Estado debe actuar para que ese efectivo retorne al sistema bancario por la vía que le corresponde, aunque no detalló cuál será la estrategia para lograrlo.