Una de las zonas más pobres de Florida, el condado de Hendry, se alista para el nuevo Aeropuerto Internacional Airglades, un centro de carga de 300 millones de dólares que podría transformar su economía. El proyecto, que aguarda su aprobación, destaca por su perfecta ubicación a solo cinco millas a las afueras de Clewiston y 90 millas al oeste de Miami. La idea consiste en convertir un aeropuerto de aviación general en un centro logístico, pero con pistas de aterrizaje y espacio adjunto, señaló la revista Business View en una entrevista a Lillie B. Rentz, gerente del Aeropuerto Internacional Airglades.
“El condado de Hendry siempre ha sido conocido principalmente por su agroindustria”, manifestó Rentz. “Nuestro proyecto traerá nuevas industrias a la zona: fabricación, distribución, comercio y logística. Si sobrevuela el condado de Hendry, todo lo que ve son granjas, muchas tierras agrícolas y, en mi opinión, un área donde la gente puede entrar y hacer crecer sus negocios”.
“Hendry tiene uno de los índices de desempleo más altos de Florida, por lo que trabajar en este proyecto brinda muchas oportunidades prometedoras al área; incluyendo no sólo el aumento de la base impositiva local sino también abundantes oportunidades laborales como resultado del proyecto”, aseguró la empresaria.
Desafíos y oportunidades
El plan para convertir el pequeño aeropuerto propiedad del condado en propiedad privada aún tiene que obtener la aprobación de la Administración Federal de Aviación (FAA), lo que dependerá en parte de la consolidación de contratos con proveedores en América Latina para demostrar su potencial como centro de productos perecederos.
Según Business View, el Aeropuerto Internacional Airglades podría convertirse en una “alternativa moderna totalmente equipada que se centrara únicamente en el mercado perecedero”, teniendo en cuenta que el Aeropuerto Internacional de Miami, el más transitado de EE.UU. en cuanto a la importación de carga y productos perecederos, está al límite.
Los líderes locales ven el proyecto como una oportunidad generacional, que podría traer más de 1,400 nuevos empleos de alta cualificación a su comunidad mayoritariamente agrícola en el borde de los Everglades, apuntó un reciente reportaje de la agencia AP.
“Tenemos uno de las zonas países más hermosas”, dijo Michael Swindle, superintendente de escuelas del condado, y, sin embargo, “según todas las métricas con las que se juzgaría a un condado, somos el número 1 o el número 2 en las categorías negativas”.
Pero para llegar a obtener grandes dividendos, los educadores de la región tendrán que superar algunas duras realidades, entre ellas que un tercio de los adultos en edad laboral no tienen un diploma de secundaria, mientras que casi la mitad habla un idioma distinto al inglés, uno de los porcentajes más altos de Florida.
Inversión en educación y capacitación
Grupos comunitarios y escuelas están trabajando para cubrir la escasez de docentes y realizar inversiones en educación para adultos. Mientras tanto, dos centros escolares para adultos se expandieron con el apoyo de Future Makers Coalition, una organización comunitaria que ha encabezado los esfuerzos de reentrenamiento educativo en todo el suroeste de Florida. También está pagando a un consejero para desarrollar nuevas habilidades en los alumnos.
Los estudiantes hispanohablantes han llenado el centro de educación para adultos en LaBelle, la capital del condado de 5,000 habitantes. En el otro centro de educación para adultos del condado, en Clewiston, decenas de estudiantes con guantes gruesos y máscaras respiratorias trabajan para obtener las certificaciones industriales necesarias para ingresar a la fuerza laboral.
Samantha Garza, de 21 años, estudió inicialmente cuidado infantil en un colegio comunitario en Fort Myers, pero cambió de carrera después de ver videos de YouTube sobre soldadoras. “Sentí que esta sería una carrera para mí”, manifestó a AP.
Incluso antes de que llegue el aeropuerto, hay muchos empleadores locales esperando contratar a los estudiantes. De hecho, U.S. Sugar, el gigante agrícola con sede en Clewiston, tiene necesidades tan urgentes que comenzó un proyecto interno, con la intención de mejorar la calidad de vida del territorio.