Los congresistas cubanoamericanos Mario Díaz-Balart, María Elvira Salazar y Carlos Giménez suscribieron este jueves una carta para alertar sobre el peligro que representa la entrada de represores del régimen de Cuba a territorio de Estados Unidos.
En la red social X, Díaz-Balart compartió la misiva dirigida a los secretarios de Estado, Antony Blinken, y de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, "expresando nuestra indignación sobre operativos del régimen cubano y abusadores de derechos humanos, como la fiscal Rosabel Roca Sampedro, que buscan ingresar a EE.UU.".
Asimismo, la publicación apunta que "ella (Roca Sampedro) y operativos del régimen son responsables por el injusto encarcelamiento de manifestantes del #J11 y representan una amenaza para nuestra seguridad nacional", en tanto agrega que estos violadores de derechos humanos no deben recibir tal beneficio mientras los inocentes manifestantes languidecen en las cárceles de la isla.
Indignación en el Congreso por entrada de represores
"Como miembros del Congreso con electores personalmente afectados por la brutalidad del régimen opresivo en Cuba, le escribimos para asegurarle que está al tanto de la indignación causada por el intento de la cubana Rosabel Roca Sampedro de ingresar a los Estados Unidos, y que usted examina cuidadosamente a quienes buscan ingresar a Estados Unidos para garantizar que no sean violadores de los derechos humanos", refiere el documento expuesto por los congresistas cubanoamericanos.
De igual forma, alude al informe publicado en el sitio web de Martí Noticias, que detalla la relación directa de Roca Sampedro, fiscal en la provincia de Camagüey, con el envío de al menos cuatro inocentes a prisión con penas que exceden los tres o cuatro años de prisión por su participación en las protestas del 11 de julio de 2021.
La misiva recuerda la legislación estadounidense, la cual otorga autoridad para la imposición de sanciones en respuesta a los abusos contra los derechos humanos, incluido el bloqueo del privilegio especial de entrada al territorio de la nación norteamericana, así como la Ley Global Magnitsky de Responsabilidad de Derechos Humanos, que le permite negar la entrada a través de la Sección 212 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, Sección 7031 (c).
"De hecho, la Administración Biden impuso sanciones específicas a un puñado de personas por su papel en la persecución de los manifestantes del 11J inmediatamente después de las protestas", detalla el texto.
Además, apunta que "ante la continua represión y los abusos contra los derechos humanos que ocurren hoy en Cuba, debemos garantizar que aquellos individuos que actúan en nombre de un régimen cruel que se opone activamente a los intereses de los EE.UU., no deberían beneficiarse del privilegio extraordinario de entrar a su territorio".
La carta constituye una alerta necesaria ante el creciente número de represores que buscan residir en EEUU, como la jueza villaclareña Melody González Pedraza, que este miércoles asistió a su primera audiencia de asilo luego de que llegara al país con parole humanitario y las autoridades de Tampa le negaran la entrada.
Actualmente detenida en Broward a la espera de una sentencia judicial, la jurista estuvo involucrada en la condena por "atentado" de cuatro jóvenes cubanos y pidió asilo político tras llegar con un permiso de viaje y un parole humanitario a Tampa, informó Martí Noticias.
Debido a las denuncias constantes del exilio cubano se ha impedido a tiempo que represores del régimen se beneficien del parole humanitario para asentarse en Estados Unidos, como fue el caso del hijo del primer ministro Manuel Marrero Cruz o el exprimer secretario del Partido Comunista en la Isla de la Juventud Liván Fuentes Álvarez.