El arquitecto Abel Tablada de la Torre, hermano de la subdirectora general de la Dirección de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (MINREX), Johana Tablada de la Torre, realizó una publicación en sus redes sociales en la que cuestionó el tratamiento informativo de la prensa oficialista tras el estallido de violencia ocurrido el pasado sábado en la Finca de los Monos.
“¿Qué es más preocupante en un país?”, preguntó Tablada: “¿Que los medios alternativos den una noticia con un dato falso, o que los medios oficiales -que pagamos todos los cubanos-, no den las noticias a tiempo, no las den completas cuando deciden darlas, no muestren las imágenes de los hechos [y] no entrevisten a nadie?”.
En una extensa reflexión, Tablada de la Torre cuestionó la cobertura oficialista de unos hechos tan graves y preocupantes protagonizados por bandas de jóvenes armados de machetes, y en los que resultaron heridas al menos seis personas. Su publicación fue compartida en el blog Segunda Cita del cantautor Silvio Rodríguez.
Análisis en profundidad de la censura en Cuba
Comparando la cobertura de estos eventos con la de los medios independientes, el arquitecto dibujó el panorama de los medios de comunicación y la conformación de la opinión pública bajo un régimen totalitario que empieza a resquebrajarse, en buena medida por la labor informativa de la prensa independiente.
“El periodismo en Cuba es vergonzoso, y si no fuera por algunos medios independientes comprometidos con la verdad, aquí no hubiera forma de enterarse y entender la realidad del país”, concluyó.
Pero la crítica de Tablada de la Torre penetró en profundidad el asunto de la manipulación y la utilización que hace el régimen cubano de la información para mantener el control social y proteger sus intereses de perpetuarse en el poder.
En ese sentido, les acusó de culpar “públicamente al que no tienen que culpar -siempre al más débil y nunca al Estado”, y de no comentar o reflexionar “sobre las causas directas y acumuladas de este tipo de fenómenos violentos cada vez más comunes en la sociedad y juventud cubanas”.
Esbozando el espíritu que subyace en los derechos a la libre expresión y libertad de prensa, Tablada de la Torre no cargó contra los medios independientes “y su propósito claro de desprestigiar todo lo que se relacione con el gobierno, culpándolo de todo”.
Al contrario, reconociendo tácitamente que es misión del periodismo investigar, cuestionar, criticar y denunciar los errores, la corrupción y las acciones de quienes gobiernan, el hermano de la funcionaria del MINREX reconoció que los medios independientes cumplen “una misión importante y vacante: informar a tiempo”.
“La prensa oficial, que es controlada y representa al gobierno cubano, no informa a tiempo y cuando lo hace es para desmentir algún dato incorrecto que dio la prensa alternativa, es decir, actúa a la defensiva en vez de llevar la iniciativa”, señaló.
Además, acusó a la prensa oficialista de “no realizar un periodismo digno, responsable y legítimo cuando se trata de temas sensibles, pues no cumple su función de ser la referencia más creíble para las noticias relacionadas con Cuba”
“Para colmo, también manipula, esconde datos, imágenes y no le da continuidad y profundidad a hechos que lo ameritan… Y así ha ocurrido desde hace décadas, a pesar de reuniones cerradas y abiertas, congresos con aires de esperanza, intervenciones emocionantes de grandes o jóvenes periodistas y de algunas promesas de presidentes y secretarios ideológicos”, añadió.
Metido de lleno en la cuestión, el arquitecto reprochó a la prensa oficialista no haber tenido “el valor y la decencia de mostrar las imágenes de miles de habaneros frente el Capitolio reclamando de forma pacífica libertad, de cientos de bayameses cantando nuestro Himno Nacional: La Bayamesa, de cientos de santiagueros pidiendo corriente y comida”.
“No tienen el valor y la decencia de cuestionarse las duras penas a muchos manifestantes pacíficos, aquellos, la mayoría, que no voltearon carros, no apedrearon vidrieras. No tienen el valor y la decencia de darle seguimiento a los mayores casos de corrupción, algunos formando parte de las altas esferas del gobierno”, dijo.
El hermano de la alta funcionaria de la cancillería tuvo más reproches para los medios oficialistas cubanos. “No tienen el valor y la decencia de analizar las causas de la inflación, del estancamiento de la economía, de la porción de responsabilidad del sistema y gobierno cubanos en lo que pasa en el país”, criticó.
“No tienen el valor y la decencia de preguntarse por qué para defenderse de las agresiones y bloqueos externos hay que aplicar uno interno, hay que proclamar y aplicar una falsa democracia, hay que oprimir de diversas formas al pueblo cubano y no buscar por todas las formas posibles esa libertad por la que tanto lucharon los mambises y los revolucionarios del 30 y los años 50s”, indicó.
La familia Tablada de la Torre: Sus contrastes
No es la primera vez que el hermano menor de Johana Tablada de la Torre utiliza sus redes sociales para criticar al régimen cubano, una actitud cívica que comparte con su madre, la psicóloga Carolina de la Torre Molina, quien también ha mostrado en varias ocasiones su opinión crítica sobre la realidad cubana.
En septiembre de 2022, Tablada de la Torre criticó la escasez de productos en oferta en el Aeropuerto Internacional José Martí, de La Habana, y se refirió al papel de los aeropuertos en la conformación de la imagen del viajero que llega y del que se va, la cual ayuda a conformar una idea de cómo funciona un país.
"Aquí en La Habana, sin embargo, ni una simple barra de guayaba pude comprar, y es el único producto que me pidió mi querida prima que me recibirá en su casa. Compré café y pude haber comprado ron y tabaco, pero Cuba no es solo ron y tabaco, como tampoco es una carátula de un libro del Che, Fidel y un carro americano de los 50", recalcó.
Por su parte, la madre de ambos también ha expresado duras críticas al pasado y el presente del régimen cubano. En octubre de 2020, De la Torre Molina criticó un mitin de repudio organizado por la Seguridad del Estado cubana contra los integrantes del Movimiento San Isidro.
"Si algún día alguien me ve en un acto de repudio, gritando e insultando a jóvenes que se quieran pacíficamente expresar, ni lo piensen: me amarran, me repudian de vuelta o me llevan a un hospital mental porque estaré fuera de mí", escribió en su muro de Facebook.
En febrero de 2021, la psicóloga criticó la falta de tolerancia y espacio en Cuba para el “pensamiento contrastante y el debate”.
“No existe espacio ni tolerancia al pensamiento contrastante y al debate, ni siquiera por parte de quien vive aquí con la esperanza de contribuir a una Cuba socialista mejor. Incluso antiimperialista”, escribió de la Torre en Facebook.
La profesora cuestionó el hecho de que Cuba posea un solo partido (el PCC) al que las “organizaciones deben seguir”, y subrayó que el estado había acabado “con la tradición de sociedades civiles y hasta de instrucción y recreo”, además de con la prensa libre. “Nadie puede abrir un blog de oposición, ni inscribir una revista crítica”, dijo.
Además de su destacada carrera profesional como profesora universitaria, investigadora y ensayista, De la Torre Molina se ha dedicado a la búsqueda de testimonios y al estudio de la vida y obra de su hermano Benjamín, quien se suicidó en 1968 después de haber quedado marcado por las tristes experiencias homofóbicas de las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP). Su historia aparece recogida en el libro Benjamín. Cuando morir es más sensato que esperar, publicado por la editorial Verbum en 2018.