Un video en TikTok del joven cubano Arguelles Positivo ha generado un intenso debate sobre el estereotipo de que "los cubanos no trabajan". En su reflexión, el tiktoker defiende a sus compatriotas, destacando las diversas y arduas labores que desempeñan muchos nacidos en la isla.
Desafiando el estereotipo
Tras reconocer que “la mayoría de los centroamericanos hacen trabajos duros” como la construcción y los techos, añade que "también hay cubanos que hacen trabajo de construcción... que hacen la electricidad... que hacen la plomería... que trabajan en los techos". Arguelles Positivo también enfatiza que muchos de sus compatriotas trabajan largas jornadas, de "10 y 12 horas diarias" y que, al llegar a casa, “llegan todo sucios y reventados”.
El joven subraya la dignidad del trabajo, independientemente de la nacionalidad o el tipo de labor, y concluye con un mensaje de unidad: "no importa quién trabaje más o quién trabaje menos, al final podemos estar donde mismo, pero no tenemos que hacer lo mismo". Esta reflexión invita a reconocer el esfuerzo y la diversidad laboral de los cubanos, desafiando así el estereotipo.
Reacciones y apoyo
Las respuestas al video han sido diversas y en su mayoría de apoyo: "Yo soy cubano y trabajo en aire acondicionado... 10 horas diarias. Personas malas y buenas hay de todas las nacionalidades"; "Mi hijo es cubano y sale a las 5 de la mañana y a veces son las 9 de la noche y no ha llegado. Mi hermano es cubano y trabaja en aire acondicionado hace 33 años"; "Existen caribeños de todo tipo. En lo personal amo a los cubanos, antes les tenía compasión por su lucha por su tierra, pero desde que conocí a unos cubanos en Las Vegas, los amo"; "Los cubanos trabajamos durísimo, pero siempre hemos tenido mucha envidia encima de nosotros y nadie mira el trabajo que hemos pasado hace 65 años", se lee entre las reacciones.
El video de Arguelles Positivo ha resonado fuertemente entre sus seguidores, quienes han compartido sus propias experiencias y sentimientos de orgullo por la comunidad cubana. Sus palabras han servido como una poderosa defensa contra los estereotipos y han reafirmado el espíritu trabajador y la resiliencia de los cubanos.