El boxeador cubano Robeisy Ramírez ha mostrado una renovada confianza mientras se prepara para su enfrentamiento contra el mexicano Brandon León Benítez, programado para el próximo 29 de junio en el James L. Knight Center en Miami Beach, Florida.
Preparación intensa y nuevos desafíos
Como evidencia de su dedicación y deseo de volver a la senda del triunfo, el exmonarca de peso pluma de la Organización Mundial de Boxeo publicó en Facebook un video que muestra su actual preparación física. “He tenido un campamento bestial con ejercicios que nunca había hecho. Los hemos ido incrementando. He hecho sparrings bestiales y todavía quedan tres semanas. ¡Estamos ready!”, declaró el dos veces medallista de oro olímpico en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.
El púgil zurdo añadió de manera desafiante: “Miami, lo que les espera es mucho”.
Motivación tras una derrota
El cubano perdió su título en diciembre pasado ante el también mexicano Rafael “El Divino” Espinoza, en uno de los combates más memorables de 2023. Con 30 años, Ramírez está decidido a demostrar que aún tiene dinamita en sus puños.
Actualmente, el boxeador de la isla cuenta con un récord profesional de 13 victorias, dos derrotas y ocho nocauts, mientras que su oponente tiene 21 éxitos, dos derrotas y nueve rivales despachados por la vía rápida.
Promesas y expectativas
Tras la oficialización del combate, Ramírez escribió en sus redes sociales: “El 29 de junio comienza mi misión de recuperar mi título mundial y de regresar a la cima, donde sé que pertenezco. Cuba vs. México nuevamente y estoy emocionado de contar con el apoyo fiel de la comunidad cubana de Miami. Así que trae tu bandera”.
“Será un evento electrizante. La travesía está muy lejos de concluir. Mi regreso será legendario. ¡El Tren regresa!”, añadió.
Una historia de sacrificio y controversia
En julio de 2018, Ramírez abandonó la preparación del equipo cubano de boxeo en Aguascalientes, México, rumbo a los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla, Colombia. La prensa oficialista cubana no tardó en criticarlo duramente: “Actitudes como estas se alejan de los valores y la disciplina que han caracterizado a nuestro deporte, que sigue comprometido con hacer el mayor aporte posible a la delegación cubana en la justa regional”.
El próximo combate de Ramírez no solo promete acción en el ring, sino que también simboliza su lucha personal por la redención y el éxito.