El senador cubanoamericano Marco Rubio ha reaccionado enérgicamente al anuncio de la llegada inminente de un submarino nuclear al puerto de La Habana, instando al presidente Joe Biden a tomar medidas contundentes. Rubio, representante del estado de Florida, expresó su preocupación a través de su cuenta de Twitter, recordando que no se ha visto un submarino ruso con misiles nucleares operando en el Caribe en más de 30 años.
"Si el régimen en Cuba decide permitir la escala de un submarino a solo 90 millas de nuestras costas, la administración Biden debe imponerles consecuencias reales", exigió Rubio.
Llegada de buques rusos
El Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de Cuba anunció que entre el 12 y el 17 de junio se realizará una "visita oficial" de un destacamento naval de la Federación de Rusia, que incluirá la fragata Gorshkov, el submarino de propulsión nuclear Kazan, el buque petrolero Pashin y el remolcador de salvamento Nikolai Chiker.
El MINREX aseguró que ninguno de los buques porta armas nucleares, por lo que su estancia en la región "no representa amenaza". La visita, según el ministerio, responde a la amistad entre Cuba y Rusia y se ajusta a las regulaciones internacionales.
"Las visitas de unidades navales de otros países es una práctica histórica del Gobierno revolucionario con naciones que mantenemos relaciones de amistad y colaboración", concluyó el comunicado del MINREX.
Respuesta de Estados Unidos
Por otra parte, la agencia AP reveló que Estados Unidos ha estado rastreando embarcaciones y aeronaves de combate rusas que se espera lleguen al Caribe para un ejercicio militar. Rusia no notificó a Estados Unidos sobre estas maniobras, pero la Marina estadounidense ha seguido de cerca sus movimientos.
Dos funcionarios estadounidenses, bajo condición de anonimato, afirmaron que este ejercicio es "sin duda" parte de una respuesta rusa al apoyo de Estados Unidos a Ucrania y un intento de Putin por demostrar que su Marina aún tiene capacidad de proyectar poder global.